... Tan Extraños

26 ago 2011

. . . la rola o ella?

Suertes a sus instintos
le amarro a mis pies sus anclas
para depositar en otro huerto sus arenas

Ella me ve de lejos casi sin mirar
aprendiz de bruja que me hechiza
y que aprisiona cualquier intento de huida. . .

Las pocas fuerzas que me quedan faltan para cantarla. . .

A raiz de nada y de nadie se de esperos
y a todos de esperos se de nadas sin raiz. . .

Y la musica sigue andando por ahi
dandole a sus pies furtivos dejos
a los que nunca se les pierde el paso. . .

Se liberan en sus trampas; alas
y se renacen en sus versos; ojos

Mientras intentan uno y otro atarle
se les pierde de vista y ni contarles
deja a todos boquiabiertos de ternura. . .

Y a la piel siempre le salvara de vez en cuando. . .

JAVIER ARVIZU

. . . Ya me espera

De espaldas no puedo verte el rostro reclamándome,
ni puedo explicarte mi derecho de existir
en lo que me das,
mi espacio para ti abierto
esta libre de compasión y de tu sombra,
sueles brillar mas alto en cielos vecinos y lejanos,
donde fuera mi desdicha cura de manos inertes,
me veo a diario en el periódico y en la televisión,
me veo sentado en la banqueta
y en la esquina donde me sabes el verso que ni yo sé
y veo a los menos esperando oportunidad
de agradecerte un cielo azul decolorando a gris,
y misericordia estará lejos
y yo habreme encontrado estrella en mi vuelo...

Marcos Cárdenas

. . . alma extraviada

Aquel día tenía el alma un poco extraviada y el corazón un poco olvidado lleno de polvo de los recuerdos amargos que se van dejando en el baúl de los recuerdos, te encontré sin quererlo.
Mi alma extraviada estaba frente a ti sin decir una sola palabra; llegue hasta ti  como el aire que se mueve inadvertido entre las hojas de los árboles.
Me senté y converse; mi alma comenzó a dar un giro, esa alma extraviada empezaba a despertar de aquel letargo lúgubre que había vivido varios meses atrás.
Tu sonrisa divina enmarco una noche inolvidable, esas horas parecían no avanzar, para los dos el tiempo se detuvo en un segundo, nos apartamos del ruido e hicimos uno sólo por algunos instantes.
Aquella noche mágica en la que tú divino hombre, diste cause a un nuevo camino para permitir a esta alma extraviada caminar por nuevos senderos.
Gran hombre que caminas por la vida con el corazón más grande que una mujer haya recordado, tu armadura es la piel que cubre tus sentidos, tu compañero es el sentimiento de vida que te falta seguir.
Tus mirada recorrió lo más profundo de mis ser, lograste crear una energía llena de luz que en mucho tiempo transcurrido creí olvidada dentro de mí.
Tus labios lograron hacer que mi alma extraviada recordara el camino de un latir en el corazón, tus caricias han logrado borrar la enorme distancia entre mi cabeza y mi corazón.
Amor de primera vista que va avanzando a pesar del murmullo de las distantes lunas que nos separan, mis brazos se extienden para comenzar a amarte, se extienden como mariposa que lleva a un nuevo rumbo su ser.
Contigo mi alma extraviada vuelve a tener rumbo y haz logrado que me sienta de nuevo libre, sin miedos, sin ataduras; tú divino hombre que al llegar a mi vida me desbocaste en un nuevo mar de ilusión.
Mi divino hombre, ten por seguro que estas amarras que hoy detienen frente a ti a esta alma, estarán hasta el resto de mis días, gracias a ti me vuelvo a encontrar entre las estrellas, hoy no hay más dudas tú eres el hombre que busque hace mucho.
Mis pies ya no se cansaran de peregrinar por los senderos del amor, hoy he detenido ese andar para entregarme a ti en cuerpo y alma, si aceptas este regalo mi alama extraviada habrá encontrado el final del camino “EL AMOR VERDADERO”.

AMBAR LUNA.

18 ago 2011

. . . nublado


No puedo ver, ahora todo se nubla…
Espero a mis sentimientos esta niebla cubra…
No quiero mentir, he caído…
Y esa noche cuanto he sufrido...
¿Paciencia?, creo que no encuentro el significado…
¿Vivencias?, muchas veces lo he experimentado…
Me encuentro atado a dos luceros inalcanzables…
No sabré cuándo es que serán libres…
¿Lo ves?, creo que sigo hundido…
Mal herido, tal vez confundido…
Me acompañas en el avance de mi ausencia…
La esperanza vuela, ¿será consecuencia?...
Ahora perdido me encuentro bajo la lluvia…
Mientras la esperanza a cada paso subía…
Solía dejarlo pasar, todo esto fue un desliz…
Ahora no sé, sólo espero que seas feliz…
Retirarme es una prioridad urgente…
Ahora te deseo mucha suerte…
Sigue contenta, alegre y sonriente…
Pues nunca cambies, así se llegue la muerte…
¿Decisión?, no, simplemente es tener razón…
En tu vida jamás debe reinar el corazón….
No querrás sufrir como la mayoría…
Es mejor vivir y dejar brotar la alegría…
¿A dónde se dirige mi camino en este momento?...
Sólo alguien lo sabe y es el viento…

                                                                                                    JUSTO VAZQUEZ

16 ago 2011

. . . vaya

Vaya que es decir bastante, escribir a la distancia
y seguir entre mis lineas a tus bellos ojos,
Vaya que es decir tan poco cual grata es mi esperanza,
y encontrar voces ajenas releyendo estas palabras, cultivandome los sueños,
Vaya que es por cierto el destino de mis dedos,
acariciar mi guitarra, tomar una pluma
y el sonar a sonsonete que el amor esta en mis miedos.
Vaya que es de dicha...
vaya que es conmigo, por tantos, por necesidad,
por gritarle al mundo.

Saul Montejano

. . . lluvia

El agua cae sobre mi piel,
gotas frescas que despiertan
y alborotan las ideas,
¡Llueve sobre mi!

Sabía de tu existencia,
acechabas en la penumbra...
escondido, como no queriendo
ser visto ni oído.

Y pensaba en tantas cosas
que al principio y al final
representaban todo y nada a la vez.
En que tal vez no volverían
mis manos a escribirte,
ni verte... ni oírte.

¿Acaso el tiempo se llegó
y no vendrá más?
Un año ha pasado,
la profesía se ha cumplido
y complicado todo a su paso.

Muero un poco cada día,
aún sabiendo que respiro
y despierto cada noche
y me duermo en tus sentidos,
y nuevamente muero al despertar.

Que me importa, si al final del día
tu estás conmigo,
yo estoy sin ti
y sin embargo
no tolero la vida a tu lado.

Perdóname los pecados
no puedo vivir sin ellos
mitad ángel, mitad humano
me tienes comiendo de tu mano,
no hay odio ni desprecio.

Amor que vives de a poco
dame el cielo con tus besos
el infierno con tus manos,
en un segundo se me va la vida
y vuelvo a nacer, si tú me miras.

ARELI GARCÍA